ENCUADRE
Obra: La primavera.
Autor: Sandro Botticelli.
Cronología: Segunda mitad del S.XV. Quatrocento (1477-1482).
Estilo artístico: Renacimiento.
Género artístico: Pintura (temple) sobre tabla.
Otras obras: El nacimiento de venus, Palas dominando al centauro, El hombre del medallón...
ANÁLISIS
Esta es una pintura al temple hecha sobre tabla en la que podemos observar una gran geometría y simetría repartida en las figuras que aparecen pintados, esto es visible porque hay las mismas figuras a un lado como a otro (cuatro) y otra justo en el centro arriba del cuadro. Estos personajes repartidos empezando de izquierda a derecha son; Mercurio (al que podemos observar con una túnica rojiza, una espada y sus sandalias aladas), las tres gracias (tres mujeres rubias reunidas en la que Botticelli utiliza una técnica de las transparencias muy conseguida), Venus (que aparece tapada con un vestido blanco con transparencias y una túnica rojiza parecida a la de Mercurio) con un pequeño cupido desnudo revoloteando encima de ella apuntando con su flecha hacia las tres gracias, la diosa Flora (aparece con una corona de flores acorde con su vestido blanco adornado casi completamente por flores), Cloris (casi totalmente desnuda solo tapada por un velo con mucha transparencia) y el viento Séfiro que aparece de color azulado con alas e intentando raptar a Cloris. Podemos observar una gran simetría ya explicada antes, un gran dominio del dibujo (predominio de la linea sobre el color) muy rápido, nervioso y excelente característico de la propia personalidad del autor, el cual no añade nada nuevo a la técnica ya utilizada a la pintura. Se puede ver la gran utilización de las curvas, la elegancia y delicadeza, siempre olvidar esos rostros tristes y melancólicos característicos de dicho autor, también equivalentes a su personalidad. En este caso se trata de un tema mitológico muy clásico y de gran belleza. No podemos olvidar mencionar el curioso concepto de que sus figuras siguen el rostro, a lo que dan la explicación de que la diosa Venus era el retrato de Simoneta Vespucci, amante de Giuliano de Médicis, y finalmente la estética principal del cuadro, con mucho uso de temas florales y el uso de colores muy alegres y primaverales.
A pesar de ciertos escorzos y posturas forzadas de determinados personajes, todo el cuadro es un monumento al orden, equilibrio y armonía del Renacimiento.
COMENTARIO
Esta obra está situada en la pintura del Quattrocento (S.XV) concretamente en la segunda mitad. La pintura de dicha época de caracteriza por su total independencia, ya que no es utilizada para adornar la arquitectura y la escultura, por la aparición de nuevos temas, como son las alegorías, el hombre y la gran revolución: pinturas totalmente paisajísticas, un estudio de la anatomía (incluso desnudos integrales). Esta es una pintura muy dibujística donde no hay retablos y que se preocupa por la composición y la armonía. Usa diversas técnicas, las cuales son; pintura mural y sobre lienzo (tela) y uso del temple (clara de huevo) hasta finales de siglo que llega el óleo (aceite de linasa). El quattrocento se subdivide en dos momentos; 1) La primera mitad del siglo caracterizado por el estudio del volumen, la perspectiva y la monumentalidad. 2) La segunda mitad del siglo, que es una pintura más delicada, narrativa, movida y con detalles cotidianos. Al igual que podemos observar dos momentos en el quattrocento también podemos diferenciar tres tendencias:
1) Continuación del gótico lineal (gran uso de la línea, el dibujo, perspectiva y dibujo alegre con autores como Fra Angelico).
2)Experimentación normativa (gran avance del volumen y el espacio que se puede ver en autores como Masaccio y Piedro della Francesca).
3) Gusto por lo complicado y rico (donde abundan los detalles cotidianos y la dinámica y la narrativa en sus obras. Aquí encontramos autores como Botticelli) de donde procede el autor de esta obra; Botticelli,que se formó en un taller de orfebrería, convirtiéndose en el pintor favorito de los Medicis, hace un arte menos revolucionario y más dulzón, aunque será una de las personalidades más influyentes y famosas de su época. Botticelli representa el espíritu neoplatónico con formas delicadas, suaves, bellas y sensibles.Suele hacer grandes cuadros mitológicos, que son alegorías de carácter didáctico-moral sobre la educación de los jóvenes. Su pintura es elegante y decorativa, al gusto refinado de la Florencia de finales de siglo XV. El color no le sirve para modelar y sus figuras son planas, pero sus pinturas rezuman clasicismo y por ello trabajó para los Medicis en una atmósfera refinada, clásica, humanista y elitista. Sus dos mejores obras mitológicas las hace para los Medicis, La primavera, y El nacimiento de Venus, que simbolizan el amor y la belleza. Otras obras de esta etapa dibujística y mitológica son la Madonna del Magnificat, El hombre del medallón y las Cuatro tablas de la historia de Nastagio Degli Honesti. A partir de 1491 su pintura cambia, influido por las predicaciones del monje Savonarola, ilustra sus sermones y abandona el espíritu profano de su estilo. Sus últimas obras son muy religiosas, y enlazan una gran espiritualidad gótica, desaparecen los vestidos de gasa y los tocados complicados; todo el encanto de la línea caligráfica se torna en nerviosismo dramático, su pintura se hace nerviosa y pesimista, un ejemplo de este cambio puede ser: La Calumnia de Apeles ( que es una alegoría de las malas virtudes frente a la desnuda verdad) y La Piedad de Munich.
Esta obra que estoy comentando pertenece a su primera etapa, en la que trabaja con los Medici y es una alegoría del reino del amor, divulgada por la filosofía neoplatónica como la "Humanitas". También se ha interpretado como una alegoría del amor entre Giuliano de Médicis (hermano de Lorenzo) y Simoneta Vespucci, dama admirada por ambos hermanos y musa del pintor, aunque también se interpreta como la muerte de Simoneta (1476), ya que ésta es alcanzada por la muerte, el Céfiro, y su renacer en el Eliseo. No está exenta la obra de elementos sugestivos y eróticos, como el Céfiro que trata de poseer a Flora o la desnudez de las Gracias bajo sus velos. Más allá de las interpretaciones simbólicas, la pintura contiene una fuerte carga de feminidad y de deseo. Toda alusión al amor y a su disfrute, toda referencia a los placeres de la vida está captada con la elegancia y refinamiento propios de Botticelli, con la delicadeza del trazo y el esplendor de los colores y la luminosidad de la obra.
CONTEXTO HISTÓRICO
El Renacimiento nace en la Italia del S.XV compuesta por múltiples repúblicas independientes que se dedican al comercio por manos de los burgueses. En esta época se dan las condiciones necesarias para el cambio del arte en Italia, sobre todo por la aparición de los mecenas que promocionaban y contrataban a los artistas. En esta época el arte recupera los valores espirituales y formales de la antigüedad clásica, del mundo greco-romano y todo está presidido por la recuperación del hombre y sus virtudes, como centro de todas las cosas (antropocentrismo), que dará lugar al concepto de Humanismo.
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ENCUADRE:
Obra: David (Plaza de la Signoría de Florencia).
Autor: Miguel Ángel Buonarroti.
Cronología: 1501-1504 d.c (Siglo XVI. Cincuecento).
Género artístico: Escultura (bulto redondo).
Estilo artístico: Renacimiento
Otras obras: Piedad del Vaticano, Moisés, Sepulcros de Giuliano y Lorenzo de Medicis ...
ANÁLISIS
Esta es una escultura exenta o de bulto redondo realizada en mármol blanco totalmente clásica en la que podemos observar un gran desarrollo de la anatomía de un hombre en plenitud física y desnudo integral. Gran detallismo sobretodo en las extremidades como la cabeza, las manos y los pies, su pelo está hecho con total naturalidad y detallismo. Observamos la famosa curva praxiteliana tan exagerada en la cadera y el contraposto, e incluso vemos dos ramas en la pierna más atrasada para darle sujeción a la escultura y un detalle en la mano derecha, la honda esta obra está hecha solo para verla de frente (frontalidad), ya que se hizo de un gran bloque de mármol muy largo, delgado y estrecho por lo que la parte trasera aunque también está estudiada anatómicamente , aparece muy aplastada. Es una obra de mucha altura (4,10m) y esbeltez.
Esta escultura representa a David el muchacho que derrotó a Goliat con su astucia, inteligencia y valor justo en el momento anterior a la lucha entre ambos. Esta situación explica esa tensión en los músculos, el pelo alborotado, la posición de la mano cogiendo y preparando la honda, los ojos hundidos, el cuello, y las venas tan resaltadas. Por tanto, se aprecia ya la “terrabilitá”, tan característica de Miguel Ángel”, que es reflejar la tensión, el esfuerzo contenido, la pasión a flor de piel, por lo que Miguel Ángel da un paso más en el clasicismo renacentista, anunciando el dramatismo manierista.
Esta obra fue realizada en la etapa de juventud o clásica del autor y fue encargada desde Florencia para ser colocada en la Plaza de la Señoría donde ha permanecido hasta hace poco que fue trasladada a la Galería de la Academia de Florencia.
COMENTARIO
La escultura del Renacimiento tiene dos momentos:
1) El Quattrocento que se caracteriza por sus formas esbeltas, blandas y curvilíneas, por el usto de lo narrativo, la gran expresividad de los sentimientos y emociones, por sus movimientos suaves, su realismo, el avance en el tratamiento del desnudo, la utilización del mármol, el bronce y la cerámica policromada dejando de lado a la madera, la representación de temas religiosos, mitológicos y alegóricos y sin olvidar los retratos ecuestres, toda esta escultura se encuentra en Florencia. Los dos autores más representativos son: Lorenzo Ghiberti (segundas y terceras puertas de la catedral de Florencia) y Donatello (San Marcos, San Jorge, San Juan, Profeta Habacuc...).
2) El Cincuecento, que se caracteriza por el triunfo de la monumentalidad, por obras simples y monumentales y la fabricación casi absolutamente solo de bulto redondo. En esta época el autor más representativo es Miguel Ángel que es el mayor escultor de la historia con diferencia y que tapa a los demás autores de la época, entre los que podemos nombrar a Cellini y Gianbologna, los cuales son escultores manieristas.
Miguel Ángel Buonarroti autor de esta obra es de origen florentino que hace estudios de anatomía perfectos (incluso estudiaba cadáveres en hospitales y cementerios), que aunque él principalmente se considera escultor tocaba todos los géneros (poesía, filosofía, humanismo,...) y todas las artes (pintura, escultura, arquitectura...), destacando en todas ellas, esta gran cultura lo convierte en el genio más importante de la historia. Salvo sus primeras obras que las hace en Roma. Trata de llevar a la escultura las grandes ideas de la humanidad, como el destino, el pecado, la salvación humana, la bondad y entre todos los temas ninguno se le resiste ninguno ni siquiera los más abstracto. Éste era un autor muy perfeccionista que trabajó solo , de carácter triste, atormentado, luchador ante la injusticia, irascible, incapaz de trabajar con nadie, que trabajaba sin preparación anterior de sus obras, las cuales hizo todas en mármol y que comprendía la escultura como el arte de la resta. Sus obras son de tal virtuosismo que transmiten sensaciones y sentimiento. Utiliza dos técnicas propias: la terribilitá (agitación interior) y el acabado non finito (obras no acabadas voluntariamente). Finalmente este autor podemos decir que tiene tres etapas cronológicas en su vida; el clasicismo de su juventud, una etapa donde cumple estrictamente las reglas de la armonía la geometría y el pulido de las obras típico del clasicismo grecorromano, una de las obras más influyentes en esta etapa de su vida es La Piedal del Vaticano, una obra que hace a los 23 años en Roma que transmite serenidad, tranquilidad , armonía y equilibrio y donde podemos observar una cara de la virgen muy joven donde quiere representar la virginidad y pureza femenina (de donde pertenece esta obra), la terribilitá de su madurez, donde su arte cambia una mayor fuerza en la musculatura unos cuerpos pesados llenos de fuerza y determinación, carácter rudo y serio, una de las obras fundamentales en esta etapa es el Moisés , al que le pone una barbe y pelo muy retorcido y lleno de tensión, que también le representa en los brazos y que también la realiza en Roma y el expresionismo dramático o manierismo de su vejez donde podemos apreciar a un Miguel Ángel envejecido, cansado muy decadente y en una crisis espiritual ya vista en autores anteriores a él, un buen ejemplo de esta etapa es La Piedad Ronadinini, su última obra muy podo definida, unos cuerpos retorcidos en los que no se diferencian los músculos, de una decadencia espiritual y sentimental abrumadora y un acabado ''non finito'' .
CONTEXTO
El Renacimiento nace en la Italia del S.XV compuesta por múltiples repúblicas independientes que se dedican al comercio por manos de los burgueses. En esta época se dan las condiciones necesarias para el cambio del arte en Italia, sobretodo por la aparición de los mecenas que promocionaban y contrataban a los artistas. En esta época el arte recupera los valores espirituales y formales de la antigüedad clásica, del mundo greco-romanoy todo está presidido por la recuperación del hombre y sus virtudes, como centro de todas las cosas (antropocentrismo), que dará lugar al concepto de Humanismo.
Excelente anàlisis.
ResponderEliminarPuedo pecar de ignorante, pero harè esta pregunta:
No fue al "David", que Miguel Angel le pegò un martillazo en la rodilla, para que no sea perfecto?
Saludos
Has traído aquí hoy una de las mayores obras escultóricas de Europa, nada menos que al David, con su mirada de firme determinación, estudiando el lugar donde va a colocar su piedra, con esa tensión en aparente reposo, un instante antes de empezar a actuar, con esa "terribilitá" tan característica de su autor.
ResponderEliminarMagnífico comentario. Felicita de mi parte a tu alumna Raquel. Estas son las cosas que nos hacen seguir con ilusión hacia adelante.
¡Qué alumnos tan fantásticos tienes, Paco! Mi enhorabuena para Raquel por los magníficos análisis que ha hecho de la Primavera de Botticelli y el David de Miguel Ángel, sin duda, dos obras maestras del Renacimiento italiano que figuran entre mis favoritas, como no podía ser de otro modo. Qué genialidad la de su autores y, concretamente, qué arrestos los de Miguel Ángel... Hace ya algún tiempo vi un documental en televisión en el que se pretendía reconstruir la labor que desplegó para alumbrar precisamente esta colosal obra suya. Ni que decir tiene que me descubrió algunos datos que desconocía y que me dejaron perplejo y maravillado a un tiempo por la complejidad material del proceso creativo y por la arrolladora personalidad del genial y polifacético toscano.
ResponderEliminarPaco, fabulosas, asimismo, las entradas de las estancias vaticanas. Qué deliciosa sensación de pequeñez se siente cuando se contempla tanta magnificencia.
Gozoso, y agradecido por tanto..., y con la intención de regresar con más tiempo para recrearme en estas últimas entregas, marcho pues de tu casa...
Que tengas una muy leve y grata jornada. Un abrazo. Buenas tardes.
Visto así, el David se ve impresionante.
ResponderEliminarTienes unos aventajados alumnos Paco. Se ve la madera del profesor.
Saludos
Ya me hubiera gustado a mí a los años de esta chica haber comentado así una obra de arte.
ResponderEliminarSaludos
Hola...
ResponderEliminarQue maravilla de comentario .. tendré que volver mañana a leer de nuevo... estelar !!
Buenas noches y que en tus sueños puedas realizar todos tus deseos.
Besitos
Eres un lujo de profesor y por tanto los alumnos te corresponden. Enhorabuena. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarMuy bien elaborados los dos comentarios de tus alumnos, cada cual en su estilo, cuidan todos los detalles y dan una visión clara y atractiva del período que tratan.
ResponderEliminarEs un gusto ver como Boticelli en su "Primavera" jugando con aspectos importantes del arte en la pintura, como son el dibujo, la simetría, la composición, el tema, las veladuras... consigue una obra de estas características. A mí, que me decanto por los pintores que priorizan el color en sus obras, me impresiona cómo puede conseguir esos efectos y esa perfección cuando utiliza más secundariamente el color.
Gracias por este post y a tus alumnos por su gran aportación. Un abrazo.