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martes, 14 de septiembre de 2010

TÉCNICAS PICTÓRICAS: EL FRESCO


Anibale Carracci. Bóveda de la Galería del Palacio Farnesio de Roma.

La pintura al fresco es una práctica que consiste en pintar sobre el muro o techo enlucido mientras aquel está húmedo, fresco, de ahí el nombre deesta técnica. El anhídrido carbónico del aire permite que la cal se transforme en carbonato cálcico haciendo posible que el pigmento se integre con el revoque. El soporte común es el muro, por lo que los frescos aparecen pintados en paredes, bóvedas, cúpulas, etc. ya sea en recintos sagrados o palaciegos, incluso domésticos, cubriendo espacios con un carácter independiente o configurando complejos programas iconográficos.
El fresco se ejecuta en jornadas de trabajo de 8 horas, ya que la cal en un periodo de 24 horas comienza su proceso de secado y no admite más pigmentos. Por ello algunos acabados se realizaban en seco, con temple, es decir, aglutinados con cola. A esa técnica se la conoce como fresco seco.
De cara a la conservación de la pintura, conviene que el muro deba ser picado a fin de que agarre la argamasa evitando posteriormente la presencia de las partículas, humedeciéndolo durante días y estar, finalmente, seco. La cal es una materia imprescindible. Se trata de óxido de calcio que se obtiene calcinando carbonato cálcico natural. Esta cal viva se convierte en apagada al incorporarle agua pura, debiendo estar lo más liberada posible de yeso puesto que éste puede provocar alteraciones en la superficie pictórica (eflorescencias). Su pureza y suavidad se logra tras mantenerla saturada incluso durante meses. La arena (material poroso que permitirá la metamorfosis de la cal), de rio o de tierra adentro, exenta de impurezas (arcilla), es el otro componente de lo que se conoce como mortero o argamasa. Se aplica en varias capas, arrojado y aplanado, sobre la superficie húmeda.
El revestimiento de un paramento también se denomina revoque o enfoscado. La primera, más gruesa, ha de cubrir el muro y se compone de una proporción mayor de arena con respecto a la cal (tres a una). Es posible que para dar mayor consistencia se añada a la preparación ladrillo molido. A este mortero común se le conoció como trullisatio. La segunda cubrición es el arriccio, dos o tres partes de fina arena por una de cal, mientras que la arena, aún con una granulometría menos gruesa, o polvos de mármol y, probablemente, en una proporción similar a la de cal, permitirá una tercera capa, logrando una superficie tersa y compacta (intonaco). Sobre este enlucido se aplicará la pintura, aunque tal vez se le dé una mano de encalado, que aportará mayor luminosidad al resultado pictórico. En cualquier caso, no siempre se opta por una superficie alisada, pues hay artistas que prefieren una superficie rugosa.

Fresco mural de la Casa de los Vetii. Pompeya. S. I d.C.

El trabajo a gran escala propio de la práctica mural dificulta la capacidad de improvisación. La principal dificultad de esta técnica es el hecho de que no se puede corregir lo hecho. Una vez que el color ha sido aplicado es inmediatamente absorbido por la base. Las únicas correcciones posteriores se pueden hacer sólo cuando el fresco ha secado, mediante aplicaciones de temple. Se puede considerar que la idea del pintor se plasma en el dibujo sobre papel y luego es trasladada al muro. La posibilidad de arrancar la pintura ha descubierto la labor preparatoria hecha sobre el enlucido (a escala real), normalmente a partir de trazos al carboncillo, hecha con tierra roja llamada de Sinope, por lo que se conoce este trabajo con el nombre de sinopia. El dibujo preparatorio sobre papel se puede organizar con líneas verticales y horizontales y, mediante esta cuadrícula, traspasarlo, proporcionalmente, a otro de pero calidad, pero a tamaño definitivo (cartón). Éste se superpone a la superficie húmeda que debe pintarse, pasando sobre los contornos de la figura o composición un punzó o el cabo del pincel, dejando así el rastro sobre el que se actuará pictóricamente. La huella dejada será guía para el pintor, aunque a veces hay otras alteraciones en este sentido. Otro sistema consiste en picar los contornos del dibujo del cartón con una ruedecilla dentada o punzones metálicos, recorriendo por estos poros una muñequilla de lienzo con carbón molido (cisquero), sistema conocido como el estarcido. Este punteado aparecerá en el enlucido, pudiendo ser precisado al pincel o esgrafiado.
También hay que indicar que se conservan bocetos al óleo sobre lienzo para las realizaciones al fresco, no solamente guía para el artista sino como prueba para el director de la programación pictórica y, en definitiva, para el cliente, quien deseaba conocer previamente el resultado definitivo. Estas obras puedieron ser tenidas por secundarias, pero posteriormente, incluso en vida del autor, se llegarían a considerar obras de arte con valor por sí mismas, siendo objeto de reconocimiento artístico y presas del coleccionismo.
La última capa de revoque se aplica en una extensión relacionada con el trabajo que el artista estaba dispuesto a realizar ese día, puesto que los pigmentos se tienen que dar sobre la superficie húmeda, por lo que esa porción era denominada jornada. Las jornadas pueden ser detectables, cual parches. También se llega a pintar por andamiadas, es decir, la extensión que equivale a la superficie, en horizontal y de arriba abajo, que puede dominar el artista trabajando sobre el andamio. Por tanto, podemos decir que el fresco es una técnica de pintura rápida y resuelta, que la meditación hay que hacerla antes y que no admite retoques, ya que el revoque se seca y, antes de que ello suceda, debe quedar reflejado en el muro lo que se quiere pintar.

Giotto. Fresco del Beso de Judas de la Capilla Scrovegni. Padua.

No todos los pigmentos son resistentes a la acción cáustica de la cal, y los hay que contienen yeso, un peligro para esta técnica.. Así pues, hay que desestimar los de origen orgánico, siendo preferibles los de procedencia mineral. Algunos como el blanco de plomo, azurita y cinabrio, se han alterado con la humedad, cambiando su composición y color. Los pigmentos se amasan con agua de cal durante cierto tiempo y se aplican, según el tipo de labor y los resultados que se persiguen, con pinceles de pelo de marta, suaves brochas de cerdas largas... Se han logrado con la esponja húmeda maravillosos efectos tonales. Los retoques tendentes a realzar algún aspecto de la obra hay que darlos utilizando la técnica de pintura en seco.
Debido a la absorción de la humedad (por terreno freático, filtración de lluvias, sales) la pintura al fresco puede sufrir alteraciones, impulsadas por la presencia de microorganismos. Esta situación hace que la obra deba ser restaurada, mientras que en algunos casos se ha procedido a su arranque trasladándola a un lugar seguro y acondicionado, ya sea con el enlucido o desprendiendo únicamente la pintura. Para ello hay que adherir telas a la superficie pictórica, traspasándola por el reverso a un nuevo soporte. Se trata de un procedimiento que permite contemplar los frescos hasta ahora de difícil acceso en lugares donde pueden ser bien apreciados y conservados, es decir, los museos.
Otra dificultad consiste en la diferencia de tono del color entre el momento de aplicación y el resultado final una vez seco. El pintor debe anticipar y adivinar el resultado final.

Miguel Angel. Juicio Final del Testero de la Capilla Sixtina del Vaticano. Roma.

El fresco es una de las realizaciones artísticas de mayor envergadura. Con antecedentes en el mundo antiguo (pinturas romanas domésticas de Pompeya), los frescos medievales de conventos y monasterios (Giotto, por ejemplo), renacentistas (desde Masaccio y Ghirlandaio hasta los de Miguel Ángel y Rafael en el Vaticano) y barrocos (Anibal Carracci o Pietro di Cortona o Andrea Pozzo) demuestran que grandes artistas dominaron esta técnica. Probablemente el ejemplo más significativo de pintura al fresco sea el conjunto de pinturas realizadas en la Bóveda y Testero de la Capilla Sixtina por Miguel Ángel. En España, practicada durante el Renacimiento por italianos (en El Escorial, por ejemplo) o algunos pintores italianizantes, adquiere un notable desarrollo durante fines del siglo XVII y el siguiente gracias también a la presencia de fresquistas italianos (Luca Giordano, Giaquinto o Tiépolo) y españoles que lo dominan, tal es el caso de Francisco Bayeu o el mismísimo Goya.
La famosa obra, La Última Cena, de Leonardo Da Vinci no puede ser considerada un fresco en sentido estricto. Su autor nunca dominó esta técnica, y debido a lo perfeccionista que era, empleó una base de arcilla y un aglutinante (elaborado de óleo y barniz) que le permitió corregir la pintura y lograr una riqueza de color y una precisión en el detalle similar a la de un cuadro al óleo. Sin embargo, el desgaste de la pintura es bastante mayor que en el caso de un fresco, en La Última Cena el deterioro comenzó a los pocos meses de terminada la obra. No tiene hoy nada que como está actualmente la obra en el Convento de Santa María de las Gracias en Milán,  a como la admiraron sus contemporáneos en dicho emplazamiento. Otro ejemplo de falso fresco realizado por Leonardo y con los mismos resultados catastróficos es el de La batalla de Anghiari, realizado en el palacio Viejo de Florencia y que resultó igualmente dañado a causa de los afanes experimentadores de su creador.


Leonardo Da Vinci. La Última Cena. Convento de Santa María de las Gracias. Milán.
Estado actual y estado tras restauración, tras como estaría cuando fue pintada.

17 comentarios:

  1. Vaya Paco, me he quedado embobada y he entendido mejor tu explicación al apreciar la comparativa con el cuadro de La última cena.
    Besos wapo.

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  2. No conocía la distinción entre frescos auténticos y falsos. Ni por la imaginación se me pasaba que la famosa "Última cena" llevaba truco. Curioso.
    Un saludo.

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  3. Hola Paco, en este post y en el anterior has tratado temas realmente interesantes para los artistas o los amantes del arte, me parece impecable el análisis que has hecho en ambos casos.
    La pintura al fresco siempre me ha parecido un verdadero milagro, tanto artístico como químico, a que pese a lo básico de los materiales, son capaces de permanecer a lo largo de los siglos. Conocemos sobre todo los frescos occidentales, pero en Asia también se utilizaban en tiempos antiquísimos, en los templos.
    Has vuelto del verano con mucha energía y eso me llena de alegría. Gracias por compartir.
    Un abrazo y hasta pronto.

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  4. Hola Paco..

    Gracias por pasar por casa, es una delicia leerte, hoy he aprendido entre lo autentico y lo falso.. no tenía idea.. Estelar entrada, en cuanto pueda, volveré a leer más..

    Un abrazo de buenas noches

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  5. Una lección magistral , pero tengo una duda : como hacen para que la pintura ne se corra fuera de las lineas de separación . No se si me explico bien .Podras aclararmelo .

    Besos desde Málaga.

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  6. Paco, como siempre interesante y didàctica entrada...si no me equivoco otro que le dio al fresco en Espana fue Luca Giordano: escalera principal de El Escorial, Catedral de Toledo, Capilla del Real Alcàzar de Madrid, Casòn del Buen Retiro...

    Saludos.

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  7. ...traigo
    sangre
    de
    la
    tarde
    herida
    en
    la
    mano
    y
    una
    vela
    de
    mi
    corazón
    para
    invitarte
    y
    darte
    este
    alma
    que
    viene
    para
    compartir
    contigo
    tu
    bello
    blog
    con
    un
    ramillete
    de
    oro
    y
    claveles
    dentro...


    desde mis
    HORAS ROTAS
    Y AULA DE PAZ


    TE SIGO TU BLOG




    CON saludos de la luna al
    reflejarse en el mar de la
    poesía...


    AFECTUOSAMENTE
    PACO




    ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE CACHORRO, FANTASMA DE LA OPERA, BLADE RUUNER Y CHOCOLATE.

    José
    Ramón...

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  8. Sí recuerdo la historia del "fresco" de la Batala de Anghiari. Leonardo se empeñaba en hacer experimentos arriesgados, en este caso con huevo, que resulataban un desastre. Poco tiempo después el mural había desaparecido. Fue una pena, porque hubiésemos tenido la oportunidad de ver frente a frente los estilos tan distintos de Leonardo y Miguel Ángel en el mismo salón.

    Besos

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  9. Gracias a todos por vuestros afectuosos comentarios.

    Rosalía: si, sería magnífico que Leonardo hubiera pintada su Última cena de manera convencional, pero los genios y los innovadores son así, y a veces comenten errores.

    Cayetano: en el arte también hay trucos o, mejor, experimentos que no siempre salen bien, aunque los haga el mismísimo Leonardo.

    Julia: llevas mucha razón en lo que parece un milagro la pintura al fresco, pero mira la cantidad de siglos que lleva algunas.

    Balovega: celebro que esta entrada te haya servido de algo. Me gratifica mucho.

    Annick: haces una muy buena pregunta, pero yo no soy pintor, aunque creo que los pigmentos vienen ya preparados para que los absorba el yeso y no se desplacen; lo preguntaré a pintores.

    Carolus II: efectivamente, Luca Giordano es uno de los primeros que introduce el fresco en el palacio de Felipe II, junto a Giaquinto y otros. Gracias por la observación.

    José Ramón: muchas gracias por ese saludo tan poético y tan bello. Aquí siempre serás bien recibido.

    Carmen: Es una auténtica pena que no se haya podido conservar la "batalla de Anghari".

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  10. Dos buenas entradas para celebrar tu regreso.

    Me alegro mucho de tu vuelta y es estupendo que
    lo hayas pasado muy bien.
    Saludos,
    un beso.-

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  11. Buen curso, largos meses nos quedan por delante, espero que plagados de buenas entradas,mejores comentario e ilusión por descubir. Desde Extremadura un saludo

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  12. Impecable la lección de hoy. La he seguido con mi segundo café matutino. He tenido la oportunidad de estar este verano en Pompeya y ha sido maravilloso contemplar las pinturas al fresco. Un saludo, siempre un placer leerte!

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  13. Giotto, otro de los grandes artistas que tendría que estar a la altura de Leonardo y Miguel Ángel, aunque sólo fuera por ser el auténtico prescursor del renacimiento en pintura, y su estela tardara en continuarse.

    Me ha encantado ver que empiezas con ganas el curso.
    Saludos.

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  14. Hola Paco! te devuelvo la visita con verdadero agrado. Veo que has empezado fuerte!
    Un saludo.

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  15. Muchas gracias a Calamanda, Manuel, Almudena, Nacho, Roberto y Tomás por vuestros comentarios y por los ánimos. Empezamos con fuerza, sí, pero veremos como terminamos. En todo caso, feliz semana y a disfrutar.

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  16. Me llevo interesantes conceptos acerca de esta técnica que desconocía y la palabra andamiada para algún verso. Me gustó.

    Un abrazo

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Deja tu opinión; me es muy válida. Gracias.